Anatomía del Pastor Alemán

lunes, 10 de marzo de 2008

PASTOR ALEMÁN

El pastor alemán es una de las razas de perro más populares del mundo. Trabajador nato, afectuoso con la familia, excelente guardián, paciente y protector con los niños. Valentía, abnegación y fidelidad son tres virtudes que caracterizan a este perro. También es conocido con el nombre de Ovejero alemán, o Perro Policía (debido a que la Policía de muchos países los utilizan para diversas tareas).

Historia


Sus orígenes se remontan a finales del siglo XIX, cuando en Alemania se inició un programa de crianza que dio como resultado el pastor alemán, expuesto por primera vez en Hanóver (Alemania) en 1882. Fruto de cruces entre pastores de Turingia y Württenberg, fue creado para guarda y protección de los rebaños de carneros contra los lobos. Maximilian von Stephanitz, capitán de caballería del ejército alemán, es considerado el padre de la raza; siendo el primer ejemplar inscrito Horand von Grafath, un animal vigoroso, de firme carácter, pelaje grisáceo y aspecto lobuno. Más tarde, tras la aparición de la Asociación de Amigos del Pastor Alemán en 1899, se inició una selección de ejemplares cuyos cruces mejoraron tanto el aspecto psíquico como físico del animal.


Hoy en día, esta raza no es sólo una de las más queridas y admiradas por los amantes de los perros, sino que sus cualidades también le han permitido trabajar en colaboración con ejércitos y policías. De hecho, los servicios prestados durante las dos guerras mundiales le granjearon un respeto y admiración universales.

Pastor Alemán Blanco


Reconocido por la F.C.I. actualmente como Pastor blanco Suizo.
Durante muchos años, los detractores del ovejero blanco, han sugerido que su color deriva del albinismo. Nada más lejos de la verdad. Su color proviene de un gen recesivo simple, del cual ambos padres deben ser portadores para continuar el color. Los ojos, nariz, labios, almohadillas son absolutamente negras, y está perfectamente adaptado al trabajo bajo sol. La raza tiene una personalidad distinta se define en su comportamiento los ovejeros blancos son más sutiles, accesibles, calmados y menos agresivos que el ovejero normal. Es equilibrado, pero cuando la ocasión lo demanda, es alerta e impaciente, es útil para servir en su capacidad como compañero, guardián o lazarillo.

El gen recesivo para el pelo blanco de la capa fue fijado en el ADN de la casta del perro del pastor alemán por fines del siglo diecinueve y el programa de crianza alemán del siglo a principios de siglo XX, que utilizó extensivamente “color cubierto”, los perros que llevaron un gen recesivo para las “capas blancas”. El abuelo maternal de Horand von Grafrath, la primera entrada “SZ 1” en el libro del perro risionero de SV, era un perro ovejero alemán de capa blanco nombrado pena von Sparwasser.

El blanco fue señalado como una avería de la conformación de la descalificación por el SV (club del pastor alemán de Alemania) en el 1933 y por el club del perro del pastor alemán de América (GSDCA) y el club del perro del pastor alemán de Canadá (GSDCC) a mediados de los años 1960.
Existen muchas variantes de color en los pastores alemanes, como color negro, negro y bordes café, y café bordes negros y manchas blancas, este último padece de una mezcla entre razas indefinida.

CARACTERÍSTICAS (I PARTE)

Aspecto General: Robusto y flexible, ligeramente alargado, cuerpo musculoso. Su natural nobleza y su seguridad inspiran respeto. Altura: entre 60 y 65cm el macho, y la hembra entre 55cm a 60cm. Peso: El macho ronda por los 30-40 kg, y la hembra entre 22 y 32 kg. Esperanza de vida: 13 a 15 años.


Generalidades: Pastor de vacas y ovejas con infatigable trote y gran inteligencia. Ha sobresalido en numerosos trabajos útiles al hombre, tales como: guardián, perro guía, policía, perro de ataque, detector de drogas, etc. Es un animal vigoroso, ágil, bien musculado, despierto y lleno de vida, sus proporciones físicas deben guardar relación no sólo en su apariencia sino también habrá que fijarse en su temperamento. Debe ser un perro bien balanceado, con un desarrollo armonioso de los miembros anteriores y posteriores. Un buen ejemplar agrada a primera vista,también es muy fuerte.


Cabeza: Tiene forma de cuña, y es en proporción con el largo del cuerpo (su largo es aproximadamente 40% de la altura de la cruz), sin parecer ni tosca ni alargada. En su apariencia general debe ser seca y moderadamente ancha en medio de las orejas. Vista por delante y por los lados, la frente es levemente arqueada y sin o con un surco mediano poco marcado. La proporción entre la región craneal y la facial debe ser de 50% a 50%. El ancho de la región craneal es casi igual que su largo. Vista de arriba, la región craneal va disminuyendo uniformemente desde las orejas hacia la nariz, dejando una depresión fronto-nasal no muy notoria e inclinándose en el hocico que tiene forma de cuña. Los maxilares superiores e inferiores están fuertemente desarrollados. La caña nasal es recta, cualquier abultamiento o hundimiento es indeseable. Los labios, de color oscuro, son firmes y bien adheridos.


Dentadura: Su dentadura es fuerte, sana y completa (42 dientes correspondiente a la fórmula de dientes). El perro Pastor Alemán tiene una mordida en tijera, de manera que los incisivos superiores cubren a los inferiores en contacto estrecho. Una mordida en pinza, un prognatismo superior o inferior así como grandes espacios entre los dientes (lagunas) son faltas. Igualmente defectuoso es el alineamiento recto de todos los incisivos. Los huesos maxilares y mandibulares deben estar fuertemente desarrollados de manera que los dientes estén hondamente encajados en el arco dental.


Trufa: Su trufa debe ser negra sin excepciones, debe ser completamente negra oscura o clara o marrón o verde.


Ojos: De tamaño medio, almendrados, colocados oblicuamente y nunca sobresalientes. Su color debe ser lo más oscuro posible. Ojos claros penetrantes son indeseables ya que afectan la expresión del perro.


El principal problema es que se ensucian (sobre todo si el perro vive en la ciudad, a causa de la contaminación). Normalmente, esta suciedad se elimina en forma de lagañas, que se le pueden limpiar con un paño húmedo. No hay que dejar que se acumulen hasta que al perro le molesten tanto que se frote con la pata.


En perros viejos, o a causa de una enfermedad o lesión, puede haber dificultades para mantener la humedad del ojo. En este caso conviene hacer una limpieza regularmente, previa consulta al veterinario para que indique el producto a usar adecuado.


Orejas: El perro pastor alemán tiene las orejas de tamaño mediano, erectas, abiertas hacia adelante y llevadas de manera uniforme (ni volteadas ni llevadas hacia los lados). Son puntiagudas con el pabellón dirigido hacia el frente. Orejas dobladas en la punta o caídas son defectuosas. Orejas echadas para atrás, en movimiento o en reposo, no se toman como falta.


Si se acumula cerumen hay que quitarlo cuidadosamente, tal como haríamos en el caso de una persona. Pero hay que hacerlo con mucho más cuidado, ya que por la forma de las orejas del perro, si simplemente soltamos las escamas de cera, caerán al interior, pudiéndole dañar el conducto auditivo. Si no estamos seguros de cómo hacerlo es mejor dejarlo en manos de un profesional; de todos modos, una buena forma de limpiar las orejas de un perro (tanto de orejas levantadas como caídas) es con un poco de algodón humedecido con vaselina líquida, siempre desde dentro hacia afuera de la oreja, sólo lo que se ve, nunca llegar más adentro ya que puede dañar.

Hay que prestar atención especial a los perros de razas que tienen las orejas caídas, que además de acumular la suciedad "normal", pueden convertirse en nidos de parásitos, entre otras cosas, por la falta de ventilación, desventaja que no tiene el pastor alemán debido a la forma de sus orejas.


Cuello: El cuello es fuerte, bien musculado y sin papada. Su angulación con el cuerpo (horizontalmente) es aproximadamente de 45º.


Cuerpo: La línea superior corre sin interrupción desde la implantación del cuello sobre la cruz bien definida y sobre la espalda muy ligeramente inclinada hasta la grupa, también levemente inclinada. La espalda es firme, fuerte y bien musculada. El lomo es amplio, fuertemente desarrollado y bien musculado. La grupa debe ser larga, inclinada ligeramente (aproximadamente 23° de la línea horizontal) y continuar hacia la línea de la cola sin interrumpir la línea superior.





CARACTERÍSTICAS (IIPARTE)

Pecho: Moderadamente amplio con el esternón lo más largo posible y bien notorio. La profundidad del pecho debe tener 45-48% de la altura en la cruz. Las costillas deben ser moderadamente redondeadas. El pecho en forma de barril o plano se considera como falta.

Cola: Llega por lo menos hasta el corvejón, pero sin sobrepasar la mitad del metatarso. Tiene el pelo más largo en su parte inferior. En reposo, la lleva colgante con una ligera curva. Cuando el perro está en movimiento o en atención, lleva la cola más alta, pero sin sobrepasar la línea horizontal. Se prohíben operaciones correctivas


Uñas: El color de las uñas en un pastor alemán, debe ser siempre negro, sin excepciones, cualquier falta de pigmentación se considera indeseable en un ejemplar de competición. A un perro que vive en el campo, se le desgastarán naturalmente. Si estamos en la ciudad es más complicado. Lo más probable es que le crezcan hasta el punto de resultar molestas para él y para las personas con las que convive, y en el peor de los casos dificultan sus andares. Por todo ello resultará imprescindible cortárselas, pero es una tarea muy delicada (no son como las de las personas), por lo que es conveniente acudir al veterinario. De hacer este trabajo en casa, debe hacerse con un cortauñas especial para perros, y sólo despuntarlas, ya que los perros tienen irrigación hasta los 3/4 de la uña, de modo que si se corta más, se hiere; de ocurrir esto, solamente se debe cubrir con un algodón con alcohol durante unos segundos.

Miembros delanteros: Vistos de todos los lados, los miembros anteriores son rectos; vistos desde el frente, son absolutamente paralelos. El omóplato y el brazo son de la misma longitud, firmemente pegados al cuerpo por medio de una buena musculatura. La angulación ideal entre el omóplato y el brazo es de 90°, pero generalmente 110°. Los codos no deben estar vueltos ni hacia afuera ni hacia adentro, estando el perro en reposo o en movimiento. Los antebrazos, vistos de cualquier lado, son rectos y paralelos entre sí, secos y bien musculados. El metacarpo tiene una longitud de aproximadamente 1/3 del antebrazo y forma una angulación con éste de aproximadamente 20-22°. Un metacarpo demasiado inclinado (más de 22°) o demasiado recto (menos de 20°) perjudica la capacidad de trabajo del perro, sobre todo su resistencia. Los pies delanteros son redondeados, compactos, con dedos arqueados. Las almohadillas deben ser firmes, pero no frágiles. Las uñas son fuertes y de color oscuro.

Miembros posteriores: La posición de los miembros traseros, vistos de atrás paralelos uno al otro, debe ser ligeramente recogida. El muslo y la pierna son casi de la misma longitud y forman un ángulo de aproximadamente 120°. Los muslos son fuertes y bien musculados. Los corvejones son fuertes y firmes; el metatarso está en posición perpendicular debajo del corvejón. Los pies traseros son compactos, levemente arqueados; almohadillas duras de color oscuro; uñas fuertes, arqueadas e igualmente de color oscuro.